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De niña a mujer

 

En una noche oscura donde la luna nueva se conecta con nuestra luna, nuestra menstruación, así empieza nuestro ciclo fértil cuando nos hacemos Mujer. Antiguamente se celebraba este momento tan importante en toda mujer que es el comienzo de nuestra sexualidad, del reconocimiento de nuestro cuerpo, de los cambios que este va teniendo; nos abrimos poco a poco como una bella flor.

 

 

El ser consciente de la naturaleza cíclica aceptándola y amándola nos permite crecer como mujeres sanas y amantes de nosotras misma, libres de prejuicios y de los estereotipos que la sociedad nos marca limitándonos para realizarnos; nuestra menarca nos invita a conectarnos con las cuatro mujeres que hay en nosotras y que nos van a acompañar en nuestra existencia. Estas están relacionadas con los cuatro arquetipos y las fases de la luna, la doncella con la luna creciente, la madre con la luna llena, la hechicera con la luna menguante y la luna nueva con la mujer sabia o anciana, tan maravillosas las cuatro que nos permiten jugar y renovarnos durante el mes optimizando cada fase y momento de los 30 días del mes y los 365 días del año siendo consciente del gran poder que tenemos y que poco a poco con el pasar del tiempo vamos perfeccionando hasta integrarlo totalmente en la plenitud que es la llamada Menopausia que no es mas que cuando se integran las cuatro fases dentro de nosotras en el momento que la sangre ya no vuelve a salir de nuestro cuerpo como lo hacia antes cada mes.


Si desde muy jóvenes entendiéramos o fuésemos iniciadas en el arte de ser Mujer, nuestra vida sería más plena, viviendo cada fase como un constante nacimiento y muerte en la que nacemos para brillar siendo nosotros mismas, y morimos para mutar cada día en plenitud y sabiduría.


Siendo jóvenes y conscientes de todo esto, nuestras decisiones y elecciones que hagamos van a ser mas asertivas llevándonos a una mejor aceptación de lo que somos con flexibilidad y al mismo tiempo con los demás; nuestras experiencias de vida serán totalmente nutridas de gozo y placer por lo que mas nos gusta, librándonos del dolor del supuesto papel de ser mujer; aún en algunas culturas nacer mujer es muy doloroso pero tenemos otras culturas que nacer mujer es una bendición, mientras existan están diferencias nos corresponde a nosotras decidir cómo queremos llevar nuestra vida si desde el dolor o el placer y para esto debemos elegir.


Algunas veces nuestro árbol ginecológico o mejor nuestras ancestras nos pueden llevar de forma sutil a que sigamos haciendo ciertas repeticiones que no son nuestras, ni siquiera de ellas sino que viene de mucho mas atrás .


Las invito a que se conecten desde su diosa interna para que sepan que es lo que realmente quieren y quienes son realmente.


“Vivir como Mujer es tomar el poder femenino en el reconocimiento de lo que verdaderamente somos para ser nosotras mismas”


foto y texto de

Mónica Home

 

Carpa Roja Colombia

 

Expresión de mujer

Sexualidad

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