La familia machista
Una familia machista se caracteriza por el peso que tiene la opinión y la figura del hombre (en la mayoría de las veces representado por el padre) sobre las mujeres de la familia.
En una familia machista, el hombre suele ser quien tiene la última palabra y muchas veces solapa o niega las opiniones de l@s demas integrantes del grupo familiar.
La falsa creencia de superioridad del hombre sobre la mujer se traslada a diferentes aspectos de la vida cotidiana:
Se hace lo que decide el hombre
Los deseos del hombre están por encima de los deseos del resto de la familia.
Limitar o estorbar el acceso de la mujer a la universidad, a la cultura o a los puestos de dirección;
El hombre suele ser quien sólo realiza tareas que sean consideradas "masculinas" (arreglos de la casa, conducir el coche, tener el control del mando, trabajar, hacer deporte, estudiar) y evita realizar aquellas tareas que son erróneamente consideradas "femeninas" y que tienen que ver con el sostenimiento del hogar: lavar los platos, cocinar, lavar, planchar, coser, cuidar de los niñ@s, etc.;
Intentar que la mujer piense o se comporte como el varón;
Considerar a la mujer como objeto sexual
Creerse el sexo fuerte y la mujer el sexo débil.
Estas y otras actitudes y creencias muchas veces llevan a las niñas, -que buscan el amor y la aceptación de su padre y su madre- a reproducir y aceptar los roles que se espera que ella cumpla: "ser buena niña", no responder, creerse inferior o débil respecto a los hombres, creer que no tienen muchos derechos que los hombres sí tienen.
Próximamente II parte:
¿Qué puedo hacer si mi familia es machista?
